Si tenemos una casa en propiedad, tener
un seguro de hogar es fundamental, ya que en una casa pueden ocurrir
muchos accidentes cuya reparación nos puede costar un dineral y que
sin un seguro no podríamos afrontar.
La cobertura principal en un seguro de
hogar es el incendio, ya que es el peor siniestro que podemos sufrir
en casa. Los daños materiales pueden suponer que la vivienda se
tenga que rehacer de nuevo, lo que puede suponer varios cientos de
miles de euros, de los que poca gente dispone hoy en día.
Por ello, como mínimo el seguro de
hogar tiene que cubrir el incendio y debemos asegurar la casa en una
cantidad adecuada que nos permita reconstruirla si sufrimos este
accidente tan devastador. En la terminología que usan los seguros a
la cantidad con la que aseguramos la casa se le denomina continente.
Pero también es importante asegurar el
contenido, es decir, lo que tenemos dentro de la casa, como muebles,
grifería y todo tipo de enseres personales. Éstos los podemos
perder en un robo o incluso en una inundación, y reponerlos todos
puede ser muy caro.
Eso sí, te recomiendo que seas
cuidadoso a la hora de elegir la cifra asegurada en el contenido, ya
que es lo que más sube la prima anual del seguro de hogar. Calcula
el valor de lo que tienes y asegura esa cantidad.
Una vez decididas las cantidades que
vas a asegurar, lo mejor es que uses un tarificador
de seguros de hogar para obtener el mejor
precio y que el pago del seguro no te suponga un esfuerzo inasumible
para tu economía. Se trata, siempre, de encontrar un buen seguro de hogar barato.
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